El pasado 30 de agosto fue el cumpleaños de un ser excepcional al que la vida, en su devenir, me obsequió con su amistad y, lo que es mejor, con su cariño desmesurado. Se llama Ingrid Matta, Samita para los que somos sus íntimos del alma. Millones de felicidades para este ser maravilloso.
Pienso sin temor a equivocarme que gracias a Facundo Cabral, a su ... |